Estima de manera rápida y automatizada el riesgo de que un estudiante abandone su carrera. De este modo, libera a los equipos responsables de éxito estudiantil de las tareas de procesamiento de datos y les permite reorientar sus esfuerzos a diseñar e implementar acciones para mejorar la retención.
Centraliza toda la información relacionada con el riesgo de deserción, integrando datos de cada estudiante que suelen estar dispersos en diferentes sistemas, ya que refieren a temas de diversa naturaleza tales como: rendimiento académico, datos personales y familiares, historial de pagos, etc.